La Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA) ha anunciado que el sector de los viajes aéreos siguió en la senda de la recuperación en octubre de 2023. La asociación espera que el conjunto de la industria gane 21.500 millones de euros en 2023, y alcance los 4.700 millones de viajes en 2024.
“Los buenos resultados de octubre acercan a la industria cada vez más a la plena recuperación del tráfico aéreo tras la pandemia. Los mercados nacionales se mantienen por encima de niveles pre-COVID. La demanda internacional se recupera, aunque más despacio. En particular, la demanda internacional de las aerolíneas de Asia-Pacífico se sitúa un 19,5% por debajo de niveles de 2019, como consecuencia del retraso en el levantamiento de las restricciones por COVID en algunas partes de la región, la evolución del comercio y las tensiones políticas”, dijo Willie Walsh, director general de IATA.
El sector aéreo prosigue con su recuperación. La Asociación Internacional de Transporte Aéreo espera que los beneficios netos de la industria aérea alcancen los 23.300 millones de dólares (21.500 millones de euros) en 2023 y asciendan a 25.700 millones de dólares (23.800 millones de euros) en 2024, dejando atrás tres años de pérdidas por el impacto de la crisis del Covid-19.
Según las previsiones publicadas este miércoles por la Asociación, se espera que los ingresos totales en 2024 crezcan un 7,6% interanual hasta alcanzar la cifra récord de 964.000 millones de dólares, mientras que el crecimiento de los gastos será ligeramente inferior, del 6,9%, para un total de 914.000 millones de dólares.
Por su parte, se espera que unos 4.700 millones de personas viajen en 2024, un máximo histórico que supera el nivel prepandémico de 4.500 millones registrado en 2019. Asimismo, se estima que los volúmenes de carga sean de 58 y 61 millones de toneladas en 2023 y 2024, respectivamente.
Balance final
“La gente valora mucho la libertad de viajar. La fuerte demanda que hemos observado durante todo el año lo confirma. Y la aviación se ha comprometido a garantizar que la gente pueda seguir disfrutando de esta libertad. Para conseguirlo a largo plazo, también debemos cumplir nuestro compromiso de lograr cero emisiones netas de carbono para 2050.
El mes pasado, la Tercera Conferencia sobre la Aviación y los Combustibles Alternativos (CAAF/3) acordó la creación de un marco global para promover la producción de combustible de aviación sostenible (SAF) con el objetivo de lograr en 2030 una reducción de un 5% de las emisiones de carbono con respecto a los combustibles fósiles utilizados en la actualidad.
Ahora, los gobiernos deben respaldar este objetivo poniendo en marcha, de forma urgente, políticas que estimulen la producción de SAF. Vale la pena repetirlo: el año pasado se compró cada gota de SAF que se produjo. Lo mismo ocurrirá este año. Sin embargo, con contadas excepciones, los gobiernos no están respondiendo a su obligación de garantizar la disponibilidad, y a un precio asequible, de SAF para contribuir a la transición energética de la industria", afirmó Walsh.