Tanto en Málaga como en Tenerife (Islas Canarias) han surgido nuevas voces disonantes en contra de la llegada de turistas, tan extrañados durante la pandemia. ¿Cómo se consigue una pacífica convivencia?

Varias viviendas y apartamentos turísticos ubicadas en el centro de la ciudad de Málaga han aparecido recientemente con pegatinas que contenían mensajes contra este tipo de alojamientos.

Según informa Málaga Hoy, el detonante de esta protesta generalizada ha sido el desahucio de Daniel Romero, empresario hostelero al que su casero decidió no renovar el contrato de arrendamiento para dedicar la vivienda al alquiler vacacional.

Al parecer, a Romero se le ocurrió publicar, a través de las redes sociales, que invitaría a cenar al autor de un juego de palabras sobre los apartamentos turísticos que obtuviera más apoyo (likes) en Instagram. Lo que este empresario no sabía es que la gente seguiría su propuesta y llegarían al punto de diseñar pegatinas con mensajes como “A Tomar por culo de aquí”, “Apestando a Turista” o “A Tu puta casa”, que acabarían pegando en los típicos carteles azules con las letras “AT”—apartamento turístico—.

El empresario ha precisado que era reírse de su "propia desgracia" y que los seguidores de su cuenta empezaron a participar en la iniciativa, pero como "la gente está tan harta", muchos imprimieron sus pegatinas y las pegaron, por lo que señala que no incitó a ello, sino que prendió "la chispa" y "lo demás surgió por combustión espontánea".

Romero advierte de que él no tiene nada en contra de los turistas ni del turismo, aunque sí rechaza la masificación turística y que no se regulen los precios de alquiler, para añadir que los precios de las viviendas también han afectado a los locales y los negocios.

Confiesa que a sus 48 años no encuentra casa pese a disponer de ingresos altos, ahorro y estabilidad laboral y se pregunta cómo será el panorama para un joven que no tenga su perfil.

Cree que ese no es el sentimiento de la sociedad, sino algo puntual; que la turismofobia no se ve en la calle; que 16.000 personas viven en Málaga directa o indirectamente de lo que genera su vivienda turística y que casi el 90 % de estas son de una persona para la que constituye su fuente de ingresos principal o secundaria.

Por su parte, el secretario general del PSOE y portavoz municipal socialista en el Ayuntamiento malagueño, Daniel Pérez, se hizo eco de la iniciativa en la red social 'X' al publicar una foto de las pegatinas y acompañarla del mensaje: "'AnTes to' esto era Centro', como dice esta pegatina junto a varios pisos turísticos".

"Recorres las calles de Málaga y es prácticamente imposible encontrar un edificio de viviendas que no tenga un candado y contraseña", ha indicado en referencia a los pisos turísticos y afirma que el alcalde, Francisco de la Torre, "sigue sin mover un dedo por los malagueños/as, expulsándolos de la ciudad que los vio nacer".

El caso en Tenerife

"Turists go home", "Mi miseria, vuestro paraíso" y "El salario medio en Canarias es de 1.200 euros" han aparecido en los últimos días en los muros y bancos del Palm Mar en el municipio de Arona, y sus alrededores, suscitando un intenso debate en las redes sociales.

El periódico inglés Daily Mail, ha publicado sobre “el enfado de los tinerfeños” por la aparición de pintadas por la isla en las que se pide a los turistas que “se vayan a casa”, dejando claro su malestar.

La aparente referencia a los bajos salarios se produce en un momento en el que la población local se enfrenta a la subida de los alquileres vacacionales y al aumento del coste de la vida provocado por la inflación.

Este acto vandálico ha llegado a provocar una división entre los residentes canarios, que han acudido a foros comunitarios para expresar sus opiniones: algunos apoyan el mensaje, mientras que otros se preguntan si crear una “pocilga sin ley” de graffiti ayuda.

“Odiamos a los 16 millones de visitantes al año, la isla se ha hundido y no tenemos ningún sitio al que ir, como vosotros. Váyanse a casa”, escribía un residente en la plataforma de Facebook junto a una de estas imágenes. “Todo es para los turistas… este es nuestro paraíso carcelario”, le respondía a otro.

El turismo en las Islas no ha dejado de crecer en los últimos años. El año pasado, la consejería de Turismo y Empleo de Canarias confirmaba “una afluencia de turistas de más de 16 millones y un volumen de negocio turístico de 20.000 millones de euros”. Aunque esto conlleva beneficios para la economía, “los residentes se enfrentan a una mayor competencia por el alojamiento y a precios inflados, y viven en una economía diseñada en torno a las necesidades de los turistas”, añadía el Daily Mail a la noticia.

Fuente https://www.tourinews.es/ https://diariodeavisos.elespanol.com https://www.dailymail.co.uk