“La experiencia de FITUR como primera feria internacional en la que participa nuestro país bajo el mandato de Alberto Fernández tuvo varios puntos de desencanto”
La experiencia de FITUR como primera feria internacionalen la que participa nuestro país bajo el mandato de Alberto Fernández tuvovarios puntos de desencanto.
Las expectativas, de acuerdo a lo que se venía haciendodesde hace más de 10 años, eran muy altas, pero la realidad se chocó contra loimaginado.
En primera instancia el stand fue insuficiente para lacantidad de empresarios reconvertidos, nuevos funcionarios que sienten lanecesidad de acompañar al nuevo ministro y dirigentes que buscan suespacio en esta nueva etapa.
Trabajar en ese reducido espacio, fue una tortura quegeneraba broncas en casi todos, aunque pocos se animaban a comentarlo en vozalta.
Los procesos de transición entre un gobierno que se va yotro que llega parecería ser un problema de difícil solución.
Permanentemente se le echa la culpa al que se fue y sinceramente,los únicos actores privilegiados quemantienen la continuidad son los empresarios/dirigentes, quienes deberían mediaren la transición para poder hacerle frente a una superpoblación de expositorescomo tuvo esta Feria.
Como hemos dicho muchas veces, los empresarios ydirigentes del sector deberían ser un poco más respetuosos de sí mismosintentando que sus palabras sean escuchadas en función de la imagen quepretenden dar de nuestro país.
Un párrafo aparte para la nueva imagen Marca País que seestrenó en FITUR 2020. Ni aún queriéndolo se podía hacer algo con tan pococriterio. Una escarapela con un corazón amarillo que generó más confusión queidentificación.
Realmente poco imaginativo, poco creativo, y si biennosotros criticamos el logo de la A sobre un círculo celeste, como en sumomento lo hicimos también con aquel que representaba a la Cruz del Sur sobreun fondo muy similar y que se había hecho en la gestión de Hernán Lombardi alfrente del Ministerio de Turismo.
¿Para qué tanto apuro? Parecería ser que para losargentinos el país cambia de acuerdo al gobierno de turno. ¿Será así?
En el encuentro del martes por la noche denominado EquipoArgentina, organizado por la Cámara Argentina de Turismo, y en donde estuvieronpresentes casi todos los participantes de FITUR por Argentina, se escuchó unvelado reproche porque el evento estaba auspiciado por Air Europa y no por AerolíneasArgentinas.
Tal vez no todos los presentes sabían que cuando se comenzó a pensar en la participaciónargentina en FITUR 2020 la CAT le solicitó a AR su colaboración como sponsor yla gestión anterior con Guillermo Dietrich y Luis Malvido a la cabeza, lenegaron rotundamente su auspicio, razón por la cual tuvieron que recurrir a AirEuropa, pero podría haber sido cualquier otra: GOL, Latam, Iberia… o cualquieraque hubiese acercado una migaja.
Definitivamente estas son algunas de las miserias denuestro país a nivel político que deberían cambiar para que cuando nospresentemos hacia afuera seamos un país y no un cúmulo de intenciones como loestamos siendo en este momento.
Si Argentina en esta nueva etapa pretende presentarsecomo un país serio, debe empezar por ser un país serio.
El turismo es una materia importante para nuestro país yquienes formamos parte de esta apasionante actividad debemos ser los primerosen creerlo.