San Telmo, el barrio céntrico de Buenos Aires que mantiene sus costumbres con el tango y los mercados como puntos principales.
San Telmo es de los primeros barrios de Buenos Aires y es por eso que allí se respira un aire especial. Huele a arquitectura colonial, a calle empedrada, a plazas llenas de cotidianeidad. Vamos a descubrir los lugares que no te podes perder de visitar en el mítico barrio de San Telmo.
1) Plaza Dorrego y feria de San Telmo
Es el corazón y punto de encuentro de quienes quieren visitar el barrio de San Telmo. Además a su alrededor se suceden bares, cafés y restaurantes de los más tradicionales, con sus mesas en la plaza y rodeado de edificios históricos que mantienen su estilo original.
Esta plaza cobra importancia histórica debido a que fue aquí el lugar en el que se comunicó al pueblo de la Independencia de Argentina.
Si coinciden en Plaza Dorrego el día domingo por la mañana, podrás ser testigo de la Feria de San Telmo, que es otra de las cosas que hacer en Buenos Aires. Los puestos de venta de artesanías y antigüedades no solo ocupan parte de la plaza sino también las calles aledañas, quedando estas cortadas al tránsito. También es común ver en la zona espectáculos callejeros de tango, ateliers de artistas y tiendas de ventas de antigüedades.
En el Mercado de San Telmo, ubicado en un edificio de fines del siglo XIX con estructura de hierro con techos de chapa y vidrio que mantienen su estructura original, encontrarás de todo un poco.
Ideado originalmente para abastecer a la gran cantidad de inmigrantes que se asentaban en la ciudad, hoy en día conserva su esencia con puestos de frutas y verduras, tiendas de venta de souvenirs y hasta un patio cervecero.
Al ser una zona tradicional de Buenos Aires no pueden faltar iglesias para visitar. La principal es la Iglesia de San Pedro González Telmo, una de las primeras de la ciudad en cuyo interior funciona un museo que exhibe valiosas piezas que datan del siglo XIX y XX. Su fachada exterior con las dos torres es todo una belleza.
Recorriendo el barrio nos encontraremos con la Iglesia Ortodoxa Rusa de la Santísima Trinidad cuyas cúpulas azules resalta en el skyline. En el interior resalta el gran mosaico traído desde San Petersburgo con la Santísima Trinidad.
La Iglesia Dinamarquesa con su estilo neogótico y su fachada de ladrillos también es un sitio que merece visitarse.
El gran edificio con su preciosa fachada de ladrillo a la vista y sus grandes ventanales, represente el arte moderno de la ciudad con la exposición de obras de arte de artistas argentinos.
Ideal para conocer toda la historia del país, el Museo Historico Nacional abarca diferentes procesos históricos de Argentina, desde los indígenas que habitaron estos suelos, pasando por la época de la colonia española hasta la independencia del país.
Entre los miles de objetos y pinturas que se exhiben, resaltan el sable corvo utilizado por José de San Martín o la histórica bandera que enarboló Manuel Belgrano en las batallas del Alto Perú. ¡Para no perdérselo!
La plaza mas grande del barrio es el Parque Lezama, antiguo jardín privado, y donde se concentra otro de los puntos de la movida de San Telmo.
En la parte central del parque se encuentra el monumento de Pedro de Mendoza, fundador de la ciudad. Más allá de ser un espacio verde con muchas esculturas, la belleza del lugar también se la dan los edificios históricos que la rodean, como el Museo Histórico Nacional o la Iglesia Ortodoxa.
Con sus escasos 2,50 metros de ancho y 13 de profundidad es considerada la casa más angosta de la ciudad de Buenos Aires. Ubicada en la calle San Lorenzo 380, data de mediados del siglo XIX y sirvió para alojar a los esclavos que servían a sus amos que residían en la casa contigua. Es un sitio muy instagrameable y que se ha puesto de moda para sacar fotos.
En los barrios Monserrat, San Telmo y Puerto Madero se diseñó un circuito callejero para homenajear a los principales personajes de historietas de Argentina a través de esculturas.
La foto que todos quieren sacarse se encuentra en la intersección de las calles Defensa y Chile y representa a la celebre Mafalda con Susanita y Manolito. En el recorrido también te puedes encontrar a Patoruzú, Hijitus, Clemente, entre otros.
Otro de los lugares que ver en San Telmo es el Zanjón de Granados. De gran importancia arqueológica, hoy pueden apreciarse túneles, pozos de aguas y cimientos originarios del siglo XVIII que fueron descubiertos casi por casualidad. Su nombre de zanjón remite a que en este lugar discurría un antiguo curso de agua sobre el cual se edificaron viviendas.
La estrecha Galeria Solar de French conserva las fachadas blancas de estilo colonial y fue lugar de residencia de Domingo French, uno de los personajes que luchó para la independencia Argentina.
Situado al lado de Plaza Dorrego, hoy destaca por sus paraguas multicolores que se encuentran suspendidos en la parte alta, donde los turistas se detienen a sacar la foto de rigor, y el restaurante con vistas a la plaza.
San Telmo es un barrio con una gran movida de bares y vida nocturna, sobre todo en las inmediaciones de Plaza Dorrego. Hoy la zona está repleta de cervecerías y pequeños centros culturales que le dan vida al lugar.
En la intersección de Independencia y Balcarce se encuentra El Viejo Almacén, una construcción que data de fines del siglo XVIII y que funcionó como almacén general. Hoy es un restaurante reconocido con show de tango.
Sobre la calle Estados Unidos y Balcarce se encuentra uno de los bares más antiguos de la ciudad, el bar Sur. En su interior se mantiene el mobiliario antiguo y uno parece remontarse a épocas pasados. Es un sitio excelente para ver tango.
En una de las esquinas de Parque Lezama, otros de los bares emblemas del barrio es el bar Británico, un sitio que mantiene su estilo antiguo e ideal para hacer una parada para comer o tomar un café si se visita el parque.