Una firma de diseño de Londres presenta un modelo de asiento de avión que despliega alas laterales, y permiten que el cuerpo se acomode mejor para dormir.
Gran parte de las innovaciones en las cabinas de los aviones se centran en la clases primera y business, pero la económica es relegada o protagoniza absurdas ideas que sacrifican la comodidad.
Pero hay aerolíneas y estudios de interiorismo que buscan cuidar al pasajero de la categoría más básica. Como es el caso de la compañía Universal Movement, creadora del asiento Interspace, que busca revolucionar el confort al momento de volar.
El fundador de la compañía es Luke Miles, que durante tres años fue jefe de diseño en Virgin Atlantic. En la feria Aircraft Cabin Innovation, que se organizó en Londres, esta firma presentó su asiento que permitirá ganar privacidad y comodidad sin añadir más centímetros al espacio.
El truco está en el respaldo. Esta parte es una plancha que se puede extender y plegar en sus extremos.
La aleta lateral que se forma, de unos 20 centímetros de largo, permite apoyar la cabeza o el resto del cuerpo con una mejor ergonomía, sin necesidad de estar doblando el cuello o recurriendo a almohadas inflables o abrigos.
Si se extiende entre los pasajeros, se puede crear una mampara que otorga, aunque sea discretamente, una cuota de privacidad; y pone punto final a la guerra fría por el apoyabrazos.
Inclusive la firma Universal Movement quiere ir más allá y propone que sus asientos tengan sensores de reconocimiento, para que las pantallas de entretenimiento se apaguen automáticamente cuando detectan que el pasajero está durmiendo.
Algunas compañías aéreas cuentan con nuevos diseños centrados en una mejora del apoyacabezas del asiento. Por ejemplo, en la clase económica en los A350 de Cathay Pacific los pasajeros pueden configurar seis opciones del cabezal.
Pero el diseño propuesto por Luke Miles propone una alternativa radical: eliminar ese accesorio. “Las sillas de los hogares y las oficinas no tienen apoyacabezas”, dijo a CNN Travel.
El prototipo exhibido en la feria de interiorismo es de fibra de carbono, un material liviano que permite ahorrar peso en la cabina sin sacrificar comodidad. Pero Miles puntualiza que su diseño de aletas laterales puede aplicarse a los asientos que actualmente tengan las aerolíneas.
A pesar de su reciente lanzamiento, su creador aseguró que está manteniendo conversaciones con varias líneas aéreas para incorporar este asiento a sus flotas.