Las Grutas es una de las ciudades costeras más interesantes por descubrir en el país. Lejos de la locura de los balnearios más conocidos se presenta como una opción más tranquila y de menor densidad poblacional. Como si eso solo no alcanzara para ser elegido, una corriente cálida que llega de Brasil sube la temperatura del mar entre los 22 y 25 grados. ¡Una verdadera delicia!

La ciudad de Las Grutas se encuentra en el nordeste patagónico, separada apenas 15 kilómetros de la localidad de San Antonio Oeste, sobre la costa atlántica de la provincia de Río Negro y bañadas ambas por las cálidas y azules aguas del golfo San Matías.
Las Grutas posee extensas playas doradas de mar calmo, con acantilados que alcanzan los ocho metros de altura, tallados por las olas en su incesante embestida. Esta continua erosión marina causó la formación de las cuevas que le dan nombre al lugar.

Calidez costera
Aquí se encuentran las aguas más cálidas de todo el litoral marítimo argentino. Una combinación de factores geográficos, atmosféricos y oceanográficos origina temperaturas entre los 22 y 25 grados. Sumando a esto las mareas de gran amplitud y las escasas lluvias en verano, las playas de Las Grutas resultan ideales para el buceo deportivo, la pesca y otras actividades náuticas como windsurf, jet ski y esquí acuático.
El sol de verano genera días con 41ºC de temperatura y promedios térmicos de 30ºC. Los paisajes de San Antonio Oeste y Las Grutas invitan tanto al descanso como a la aventura. Sus costas, con médanos y barrancas de arenas blancas y limpias, son propicias tanto para largas caminatas como para paseos en cuatriciclos y sandboard.

El balneario cuenta con más de diez paradores de playa y la posibilidad de realizar, entre otras actividades, avistaje de fauna marina y avifauna.

Las Grutas cuenta, además, con una destacada oferta gastronómica, con variedad de platos como cazuelas de mariscos, pulpitos en escabeche, rabas, almejas gratinadas y paellas que, maridadas con los vinos elaborados en la provincia, se transforman en una explosión de sabores garantizada.

Cuando se busca una alternativa para pasar el día, al sur del balneario existe un gran número de playas agrestes como Piedras Coloradas, con costas amplias y poco profundas y un inigualable paisaje de rocas rojizas. El Sótano, El Cañadón de las Ostras y el Fuerte Argentino son, también, rincones que permiten conocer la riqueza ecológica de la costa rionegrina.

Un mundo bajo el agua
Las Grutas es el portal de acceso a los misterios de las profundidades. Aguas transparentes, temperaturas propicias y abundantes parques naturales definen el marco ideal para la práctica del buceo deportivo en todas sus modalidades.
El bautismo submarino permite a todo público sumergirse en los primeros metros de una experiencia que cambia la manera de ver las cosas.
Para buzos experimentados existen excursiones especiales y se ha puesto en marcha el programa de creación de arrecifes artificiales, una modalidad que nuclea un sin fin de adeptos a nivel global.
Ante las máscaras del buceador aparecen distintas especies de animales marinos: meros, salmones, besugos, estrellas de mar y gran variedad de crustáceos y moluscos.
El parque submarino de Las Grutas incluye un sistema de varios sitios que ofrecen distinto nivel de dificultad al visitante. Frente a la tercera bajada se encuentra la plataforma de buceo desde la cual se accede a una formación rocosa sumergida en la que se realiza el tradicional bautismo submarino. El sitio tiene una profundidad de entre 3 y 6 metros y se encuentra poblado por gran parte de las especies submarinas patagónicas.

Visita por las islas
Existen otros sitios hacia el sur, como La Isla o hacia el norte como Playa Orengo, que ofrecen mayores extensiones y variedad de formaciones para recorrer pero también más corrientes y profundidad.
En la zona del intermareal, durante las horas de bajamar, se forma un sistema de pozas de poca profundidad en las que se concentran animales jóvenes de distintas especies permitiendo su observación mediante el snorkeling.

Se puede ir en auto
Para acceder desde Buenos Aires a este rincón patagónico, se debe tomar la ruta nacional 3, la provincial 51 y luego nuevamente la 3. Se puede llegar en avión la ciudad de Viedma y desde allí recorrer 188 kilómetros por vía terrestre hasta Las Grutas.