Bahamas se encuentra a apenas 80 km de la costa de la Florida. Esa es la razón por la cual visitarla cada vez que uno viaja a Miami es un clásico y se puede hacer en barco o en avión.
Son 700 islas y cayos que transportan a los viajeros fuera de su rutina diaria y rumbo al paraíso. Las Islas de Las Bahamas ofrecen un paisaje único, pero también muchas actividades como pesca, buceo, espectaculares paseos en bote y miles de kilómetros de las aguas y playas más espectaculares de la tierra. Y uno de los placeres más populares es disfrutar de su gastronomía única.
Aquí les contamos 7 platos que sí o sí hay que experimentar cuando uno viaja a Bahamas:
Conch Salad - un gran caracol de mar que los bahameños comen de diferentes maneras. Aunque el término "caracol de mar" pueda sonar extraño en un principio, hay que atreverse a probarlo, descubrir su sabor inesperadamente suave y agradable, lejos de lo intimidante que su nombre podría sugerir. Entre las variantes de preparación, la más popular es al natural, crudo en una ensalada aliñada y refrescante donde el famoso molusco se combina con cebolla, pimiento y, a gusto de cada cual, guindilla, piña, manzana.Y, por supuesto, para darle un toque tropical, mucho limón o naranja. El resultado es la explosión de sabor de uno de los manjares más tradicionales de Las Bahamas.
Conch Chowder – en el otro extremo, en una versión picante, está el conch chowder que es el favorito de los locales y también enamora a los visitantes. Es lo que los afroamericanos llamarían "comida del alma". Se trata de una sopa con trozos de caracol, zanahorias, patatas y un caldo oscuro muy sabroso. Se sirve acompañada de Johnny Cake (un pan local hecho en las islas) o sémola de maíz. Es una comida sustanciosa que puede disfrutarse a cualquier hora del día. En el desayuno, almuerzo o en la cena.
Conch Fritters (Buñuelos de caracol) - ¡es hora de añadir la fritura! Este aperitivo puede parecer un buñuelo corriente pero no se deje engañar, en Las Bahamas está relleno de caracol, cebolla, pimiento verde y pimiento de cabra. Rápido y fácil de hacer, se puede encontrar en prácticamente todos los restaurantes locales. Servido con una salsa Junkanoo (un delicioso secretito bahameño), es una opción estupenda para abrir el apetito o para los que sólo quieren picar algo mientras disfrutan de las hermosas playas del destino. Es perfecto para acompañar con una cerveza fría o una clásica, tropical y refrescante Bahama Mama.
Souse - característico de los desayunos en Las Bahamas pero también considerado como una cura para la resaca, el souse es algo así como la versión bahameña de una buena sopa de pollo tradicional. La diferencia radica en la adición de varias proteínas. Puede incluir pollo, lengua de oveja, patas de cerdo, costillas o incluso pavo. El caldo, increíble y picante, incluye patatas, cebollas y pimiento de cabra, que suele ir en otro plato, según su gusto por las especias. Algunos añaden zanahorias para darle un poco de dulzor y color.
Chicken-In-The-Bag - Después de la ensalada, la sopa, el caldo y la fritura, es hora de una comida sustanciosa. Aunque un poco grasosa, es deliciosa. El Chicken-In-The-Bag estándar consiste en un trozo de muslo o pechuga de pollo frito con patatas fritas envueltas en ketchup y salsa picante. Se puede añadir mayonesa, cebolla, caracoles fritos, etc.
Guava Duff - postre tradicional que ofrece el final perfecto para cualquier comida en este maravilloso destino. Este dulce combina guayaba, una fruta tropical, con una masa dulce y se rocía con una salsa especial de mantequilla hecha con ron o coñac. Es un plato delicioso que seguro complacerá a quienes busquen un final dulce para su paladar después de disfrutar de la cocina bahameña.
Rum Cake - la torta o bizcocho de ron, típica de Las Bahamas, es otra especialidad local que refleja la popularidad del ron en la región, siendo una de las bebidas más consumidas en el archipiélago. El bizcocho, como su nombre lo indica, contiene obviamente ron en su receta, lo que lo convierte en la opción favorita de quienes desean satisfacer su antojo de algo dulce, pero sin llegar al extremo. Combina el fuerte sabor del ron con la suave textura de un pastel, creando una experiencia única para el paladar.
Más info: www.bahamas.com