Desde que comenzó, esta ruta compensó más de 5.900 toneladas de CO2e, convirtiendo cada vuelo en un gesto de respeto hacia el medio ambiente.
Además, desde junio de 2021, con el programa #MiVueloCompensa, quienes volaron compensaron voluntariamente 19.400 toneladas de CO2e en sus vuelos. Este esfuerzo es equivalente a conservar aproximadamente 2.781.622 árboles o mantener 4.837 hectáreas de bosque cada año. La eficiencia en el consumo de combustible y las bajas emisiones de los aviones Boeing 737 MAX también potenciaron estas iniciativas sostenibles.
Bonito, ubicado en Mato Grosso do Sul, Brasil, se estableció como un destino líder en ecoturismo por su enfoque sostenible y respetuoso con el medio ambiente. Allí es posible apreciar ríos cristalinos, impresionantes cuevas y una amplia biodiversidad, y es por eso que los viajeros que comulgan con la naturaleza optan por este destino. Además, la región cuenta con políticas estrictas que limitan el número de visitantes diarios para minimizar el impacto ambiental, asegurando la preservación de su entorno natural único.
A su vez, este lugar ofrece vivir experiencias únicas como es hacer snorkel en el río Sucuri, explorar la Gruta del Lago Azul, o caminar por senderos llenos de flora y fauna diversa. Estas actividades promueven un respeto profundo y una relación cuidadosa con la naturaleza, educando a los turistas sobre la importancia de la conservación ambiental.
Bonito se convirtió en un ejemplo de cómo el turismo puede contribuir al desarrollo económico local de manera sostenible. Eso se logró mediante la capacitación de guías locales y la promoción de alojamientos y servicios que cumplen con altos estándares ecológicos. Estas medidas implementadas no solo protegen el patrimonio natural, sino que también muestra que el turismo y la conservación ambiental pueden avanzar juntos en beneficio mutuo.
Por otra parte, la línea área brasilera se distingue por ser la primera de ese país en comprometerse a alcanzar un balance de carbono cero para 2050. Durante los últimos doce años, implementó una serie de iniciativas para reducir la huella climática de sus operaciones. La compensación de carbono es un objetivo clave para la empresa, contribuyendo así a la protección del espacio aéreo, el entorno de los aeropuertos y el medio ambiente en general.