Cada nación posee una identidad gastronómica única, repleta de platos tradicionales que son verdaderos tesoros culinarios. Si hacemos un viaje por las mejores cocinas del mundo, para explorar los sabores más emblemáticos que todos deberíamos degustar al menos una vez en nuestra vida, te sorprenderías. Algunos ni siquiera los hemos sentido nombrar.
Grecia: Moussaka la reina de la cocina de Grecia. Este plato tradicional combina capas de berenjenas, carne picada y una generosa capa de salsa bechamel. Luego se lleva a gratinar al horno y al degustarla sentiras un sabor único en tu paladar.
España: Paella, el sabor nacional. La icónica paella, originaria de la Comunidad Valenciana, se elabora con arroz, azafrán, verduras frescas, carnes y mariscos. Cocinado en una paellera especial, es una explosión de sabores y una celebración de la vida mediterránea.
Italia: Lasagna. Este plato clásico italiano es una deliciosa obra maestra de capas. Comienza con finas láminas de pasta intercaladas con una rica mezcla de carne, salsa bechamel y queso. Luego se hornea hasta obtener una textura cremosa y una capa dorada por encima. Este plato es un verdadero placer para los amantes de la comida italiana.
México: Mole. El país atrapa con su mole, una salsa espesa y compleja que combina chiles, especias, chocolate y otros ingredientes. Comúnmente se sirve sobre pollo o pavo, y representa la riqueza de la cocina mexicana. Cada región tiene su propia variante de mole, lo que lo convierte en un viaje culinario en sí mismo.
India: Curry, es el plato estrella. Típico de la cocina india se elabora con una mezcla de especias, carne, pescado o verduras. Se sirve con arroz o pan naan, y ofrece una explosión de sabores y aromas que son simplemente inolvidables.
Francia: Soufflé. Se trata de una creación culinaria que parece desafiar la gravedad, lo cual se debe a que consiste en una mezcla de huevos, queso y otros ingredientes, que se hornea hasta que sube y adquiere una textura esponjosa y aireada. Es una delicia que merece ser probada al menos una vez en la vida.
Perú: Ceviche. El ceviche brilla con luz propia, es el plato típico peruano, elaborado con pescado crudo marinado en jugo de limón, ají, cebolla y cilantro y está acompañado de maíz y camote.
Tailandia: Pad Thai, un plato de fideos de arroz salteados con huevo, tofu, camarones, brotes de soja y cacahuetes. Todo ello es aderezado con una irresistible salsa agridulce, de manera que cada bocado es un equilibrio perfecto de sabores y texturas.
Dinamarca: Smørrebrød. Se trata de un plato tradicional danés que está elaborado con una rebanada de pan de centeno untada con mantequilla y cubierta con una variedad de ingredientes, como pescado, carne, queso y verduras.
Japón: Sushi: Es un plato icónico japonés que combina arroz avinagrado con pescado crudo, mariscos, verduras y otros ingredientes. Presentado en forma de rollos envueltos en algas nori o en piezas de nigiri, el sushi es una expresión artística y culinaria.
Cada región del mundo tiene ingredientes únicos y técnicas de cocina que aportan sabores y texturas diferentes. La variedad puede sorprendernos y abrir el paladar a nuevos gustos. Te animás?