El chef Darío Galizia agasaja a sus visitantes con su cocina mediterránea con toques de autor, influenciada por su experiencia en hoteles y restaurantes de lujo en Europa.
Loi Suites abrió su jardín de invierno no solo para sus huéspedes, sino también para quienes deseen disfrutar de su propuesta gastronómica en un entorno único en el barrio de Recoleta.
"La propuesta culinaria del hotel busca crear una experiencia inolvidable en cada visita. Ya sea en familia, en pareja o con amigos, la cuidadosa selección de cócteles, vinos y el exquisito diseño de cada menú transforman cada momento en una aventura culinaria sin igual. La hospitalidad es el nuevo lujo y en Loi queremos que cada persona que se acerca sienta esa calidez que es el ADN del hotel", expresa Gabriela Giancristófaro, gerente de Loi Suites Recoleta.
Rodeado de vegetación, el jardín evoca un ambiente tropical adornado con detalles en mármol y sillas de mimbre, formando un auténtico oasis donde parece que la primavera reina todo el año. Este lugar, iluminado por la luz natural que entra a través de su techo de vidrio, proporciona una atmósfera encantadora tanto durante el día como en la noche. Así, el restaurante se transforma en una elección exclusiva para deleitarse con sus diversas ofertas: desayunos, almuerzos, meriendas y cenas.
La oferta gastronómica, a cargo del chef ejecutivo Darío Galizia, se basa en productos frescos de temporada, destacando un estilo mediterráneo, trabajados artesanalmente. Las pastas son de elaboración propia. Además, cuentan con cortes de carne típicos argentinos y pescados frescos de calidad, así como la pastelería clásica moderna y la panadería artesanal.
Además del menú regular, cada mes el chef presenta sugerencias con productos de temporada. Entre las opciones más destacadas se encuentran el Salmón con parmentier de calabaza y kale, juliana de vegetales y pak choi con salsa thai y coulis de tomates asados con cilantro y lima, Boeuf bourguignon de cordero patagónico con champiñones, cebollitas confitadas, batata rissole y zanahoria cocotte, y como postre, Creme bruleé de chocolate blanco y Baileys.
El tradicional té de la tarde incluye infusiones, jugos naturales y una copa de espumante, acompañado de preparaciones dulces como macarons, scones de naranja, financiers de avellanas y frutos rojos, lingote de chocolate y dulce de leche, pie de diplomata, entre otras delicias.