Su versatilidad es infinita, ya que se pueden preparar con una amplia variedad de ingredientes y combinar sabores dulces, salados, ácidos y picantes, esto hace que cada aperitivo sea único. Como cada año, el 19 de septiembre se celebra el Día Mundial del Aperitivo, una celebración que ganó popularidad a nivel global y se convirtió en una ocasión para reconocer y valorar el arte del disfrute.
El concepto de "aperitivo" proviene del latín "aperire", que significa "abrir". Originalmente, se refería a una bebida que abría el apetito antes de la comida principal. Hoy en día, esta tradición fue adoptada en muchos países, cada uno aportando su propio toque cultural y culinario.
En Argentina, el aperitivo no solo acompaña alimentos, sino que también sirve como preludio para bebidas más fuertes.
El aperitivo toma forma a través de bebidas refrescantes que pueden ser adaptadas con infinitas combinaciones, haciendo arte y transportando por medio de cada uno de sus ingredientes a la cultura e historia de sus orígenes. Es una ventana a experiencias que sorprenden y descubren sabores clásicos e inesperados.
Algunos de los aperitivos que se pueden disfrutar en su día son: Cinzano Segundo, se trata de un Vermut del Nuevo Mundo, y como uno de estos, está vinculado a zonas vitivinícolas donde el vino local es el protagonista y tiene una enorme influencia sobre sus aromas y sabores. En su caso la variedad elegida es el Malbec. Cuenta con dos maceraciones: el mix de hierbas secretas de Cinzano Rosso se maceran en la base vínica, y luego se combinan con la maceración vínica realizada a partir de las hierbas locales (manzanilla y artemisa cuyana). El blend se completa con la presencia de especias y frutas: los aromas naturales de la canela, y la piel de naranja.
También el Campari Spritz; el Negroni, Aperol Spritz; Cynar Julep; que combinan mentas, citricos, soda y la magia del autor.