Cuando en 1978 se inauguró en Córdoba el estadio Mario Alberto Kempes su objetivo principal fue el Mundial de Fútbol. Sin embargo, aquello fue sólo el principio: esa cancha sería sede de los más importantes eventos deportivos y culturales, tanto a nivel nacional como internacional.  Tal es así que el próximo 23 de octubre el ex Beatle Paul McCartney volverá al popularmente conocido Chateau Carreras para ofrecer su único recital en Argentina por fuera de la Ciudad de Buenos Aires. Será la segunda vez que el músico pise ese estadio, tal como lo hizo en 2016. 

Pero no sólo el autor de Hey Jude montó su escenario en el Kempes a lo largo de su historia. Joaquín Sabina, Joan Manuel Serrat, Shakira, Madonna, Iron Maiden, Justin Bieber, Maná, Romeo Santos y Ricardo Arjona fueron otros de los artistas que sonaron en el lugar.

Paul McCartney tuvo su primer concierto en Córdoba el 15 de mayo de 2016, en el marco de la gira “One on one”. El cantante tocó aquella vez ante 45 mil personas. Madonna lo hizo el 22 de diciembre de 2012, en medio del “MDNA Tour”. El recital contó con 50 mil asistentes. Justin Bieber, en tanto, se presentó allí el 8 de noviembre de 2013 y ofreció un show para 30 mil personas, en el marco del Festival Z.  Shakira hizo lo suyo el 3 de marzo de 2011 ante 20 mil personas. Frente a la misma cantidad de público Iron Maiden tocó en ese estadio el 12 de marzo de 2016. 

Dentro del ámbito local, figuras como Abel Pintos, Tini Stoessel, Carlos “la Mona” Jiménez, La Renga, Divididos, María Becerra y Luciano Pereyra también dijeron presente. 

Estrellas del fútbol mundial en el Kempes

Córdoba fue durante décadas escenario de encuentros memorables con algunas de las leyendas más grandes del fútbol mundial. Además de ser la cuna de numerosos campeones (nueve campeones del mundo), la ciudad fue anfitriona de celebridades futbolísticas de renombre.

Otro que pasó por el Chateau fue Franz Beckenbauer, capitán del Bayern Munich y campeón del mundo en 1974. Fue en 1978, cuando visitó la ciudad con el equipo Cosmos de Nueva York. El estadio estaba lleno, y el evento incluyó un recital de Gloria Gaynor.

Diego Armando Maradona, después de traer la Copa del Mundo de 1986, se puso la camiseta de Belgrano en un amistoso. El hecho marcó uno de los grandes hitos de la historia del estadio.

Finalmente, antes de alcanzar la gloria en Qatar, Lionel Messi tuvo momentos inolvidables, tanto en la Copa América de 2011, como con su memorable gol de tiro libre en 2012 frente a Paraguay, ante 60.000 espectadores que lo ovacionaron de pie en el Kempes. La última vez que visitó el mundialista fue en 2016, en un partido por eliminatorias sudamericanas, donde la selección se enfrentó a su par de Bolivia.

Estadio Kempes: un templo hecho museo

El Kempes revive hoy gestas deportivas inolvidables que emocionaron a multitudes, desde la victoria de Argentina en 1978 hasta los momentos épicos de íconos como Diego Maradona, el propio Mario Kempes y Lionel Messi. Fue diseñado para la Copa Mundial de ese año -la que le dio la primera estrella a la Selección Argentina- y fue testigo de eventos memorables, desde partidos mundialistas hasta los más grandes espectáculos musicales y culturales.

El Kempes es la herencia arquitectónica más importante que le dejó a la ciudad el Mundial de Fútbol de 1978. Pero no sólo es una cancha: uno de sus grandes valores es el Museo Provincial del Deporte. Allí pueden observarse numerosos recuerdos físicos de la Copa del Mundo de 1978. Entre algunos de los más destacados están las camisetas originales que Holanda y Francia usaron durante el partido que los enfrentó.

Para los fanáticos, también existe una colección de entradas originales de cada uno de los partidos del mundial, incluida la de un partido que no se llegó a jugar. Del evento mundialista, se recuperaron maquinarias, papelería de la época y hasta merchandising.

Asimismo, cuentan con 250 piezas originales y material audiovisual que ya atrajo a más de 300.000 visitantes. Un auto de carrera, cinturones de boxeadores, raquetas de tenis o camisetas de las principales estrellas del fútbol internacional -la mayoría vestidas en juego- son otras de las atracciones.