Realizar rafting en los ríos Corcovado y Futaleufú se vuelve una aventura inigualable y les da a los visitantes, la oportunidad de disfrutar de la emoción y los paisajes más impresionantes de la Cordillera de los Andes. Las excursiones están diseñadas para adaptarse a la experiencia y tiempo disponible de cada visitante, tanto principiantes como expertos, pueden sumergirse en esta actividad llena de adrenalina y belleza natural. Desde desafiantes rápidos hasta momentos de relax en medio de la naturaleza, el rafting en estos ríos es una experiencia al alcance de todos.
Río Corcovado – La experiencia perfecta para principiantes
El Río Corcovado, ubicado en Esquel, presenta un desafío moderado con una dificultad de clase II y III, ideal para aquellos que no tienen experiencia previa. Las excursiones, que parten desde allí, incluyen guías especializados y equipos adecuados para disfrutar al máximo de esta actividad. Los visitantes pueden optar por una bajada de 2 horas o por una excursión de día completo de aproximadamente 17 kilómetros. Durante el recorrido, los guías agregan toques especiales a la aventura, como la posibilidad de nadar en las aguas del río, saltar desde las rocas, o incluso desafiar la adrenalina saltando desde un puente. Para los más aventureros, existe una opción con dificultad clase IV, que recorre 10 kilómetros y llega hasta la frontera con Chile.
Río Futaleufú: Un desafío para los más osados
Al otro lado de la Cordillera de los Andes, en Chile, el Río Futaleufú ofrece un reto para los más experimentados en rafting. Esta excursión de dos días recorre rápidos de clase IV y V en un escenario natural imponente, permitiendo disfrutar de vistas únicas de la región mientras se navega por sus aguas turbulentas.
Para las excursiones de rafting de clase II/III, no es necesario tener experiencia previa, ya que cada balsa cuenta con un guía especializado que dará instrucciones para una navegación segura y divertida. Los participantes tienen un equipo de seguridad completo, que incluye chaleco salvavidas y casco, además de contar con el acompañamiento de un safety kayak.La temporada óptima para disfrutar de esta actividad se extiende de diciembre a marzo, dependiendo de las condiciones climáticas y la cantidad de agua. Las excursiones pueden ser contratadas a través de las Agencias de Viajes y Turismo locales.
El Río Corcovado continúa su curso en Chile bajo el nombre de Río Palena, y se realizan excursiones que permiten recorrerlo hasta su desembocadura en el Océano Pacífico, para una experiencia aún más espectacular.