Córdoba vuelve a encender sus luces, su ritmo y su voz: el cuarteto, ese pulso alegre que atraviesa generaciones, barrios y noches enteras, fue declarado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO. Un hito histórico que transforma a la música más emblemática de la provincia en un símbolo cultural de alcance global.
Nacido en los clubes de barrio, fortalecido en salones populares y reinventado una y otra vez por músicos, compositores, productores y un público fiel que lo convirtió en experiencia colectiva, el cuarteto es mucho más que un género musical: es una forma de vida profundamente cordobesa.

La decisión del Comité Intergubernamental de la UNESCO, reunido en Nueva Delhi, reconoce no solo su trayectoria, sino también sus prácticas sociales asociadas al baile, la música y la letra, y ese arraigo comunitario que lo mantiene vivo, vibrante y en constante evolución. La candidatura argentina destacó justamente esa esencia: una tradición que se aprende, se transmite y se celebra de manera cotidiana.

La incorporación del cuarteto a la lista de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad es una invitación al mundo a mirar hacia Córdoba con nuevos ojos. A descubrir sus noches encendidas, sus festivales, sus salas icónicas y la energía contagiosa que hace imposible quedarse quieto. Es, también, una oportunidad para que viajeros y viajeras experimenten en primera persona la identidad cultural más auténtica de la provincia.
Hoy, Córdoba suma un nuevo motivo para ser visitada, recorrida y celebrada. Porque donde suena el cuarteto, Córdoba late un poco más fuerte.