La actual crisis de la aviación comercial sigue dejando empresas en riesgo de desaparecer, miles de empleados sin trabajo y hasta modelos de avión que se despiden para siempre de los cielos. Emirates, Thai Airways y Air Canada son algunas de ellas.
Las malas noticias llegan desde todos los hemisferios y continentes. Nadie se libra de este caos provocado por la pandemia del Covid-19.
Lo más nuevo llega hoy desde Tailandia con la noticia de que la prestigiosa y siempre reconocida como una de las mejores compañías aéreas del mundo, Thai Airways, acaba de declararse en quiebra para acceder a un préstamo estatal clave para garantizar su futuro. Según informa Efe, el primer ministro de Tailandia, Prayut Chan-ocha, ya ha aprobado la propuesta.
La aerolínea, que cuenta con una flota de 80 aviones y una cifra aproximada de 22.000 empleados, acumula una deuda de unos 8.650 millones de euros. Parte de sus préstamos vencían a finales de mayo, pero la paralización de la actividad por la pandemia de Covid-19 hace inviable que Thai Airways pueda hacer frente a los mismos. El portavoz del primer ministro, Narumon Pinyosinwat, revela que “no está decidida la fecha (para declarar la quiebra) ante el tribunal”. Está previsto que el mandatario tailandés aporte este martes 19 de mayo más información sobre el plan de rescate de la compañía aérea y la hoja de ruta para el futuro.
La empresa aérea de Dubai estudia despedir 30 mil empleados en un intento desesperado por reducir costos después de que el virus Covid 19 la obligara a paralizar sus operaciones casi totalmente, según versiones que circulan en los entornos aéreos de Dubai. La compañía no quiso ni confirmar ni desmentir estas informaciones. Esto significaría despedir una tercera parte de su plantilla, de 105 mil trabajadores.
Pero más importante, la compañía considera la posibilidad de acelerar la retirada de los aviones A380, de los que acaba de recibir los últimos modelos que aún fabrica Airbus en Francia. Emirates es el primer operador mundial de este tipo de avión que la mayor parte de las compañías aéreas consideran poco rentable.
El británico Tim Clark, el presidente de Emirates, dijo hace unos días que cree que la demanda de vuelos no volverá al nivel previo a la crisis, al menos por dos años.
El gobierno de Dubai ha admitido que hará todo lo que esté en su mano para salvar la aerolínea, que ya está aplicando medidas de austeridad muy severas, entre ellas recortes de salarios. Algunos aviones que no les han entregado aún, han sido negociados con el fabricante para ser retrasados, por ejemplo.
Azul Linhas Aéreas publicó los datos que cuantifican el primer impacto de la pandemia de coronavirus en sus finanzas: desde que fue declarada a mediados de marzo, se produjo un desplome de la demanda que llevó sus números del primer trimestre del año a un rojo de más de U$S 1.000 millones. Y a este panorama se sumó la devaluación del real. Por eso, la empresa acordó con Embraer un retraso en la entrega de aeronaves. Las máquinas que iba a recibir Azul entre 2020 y 2023, ahora llegarán entre 2024 y 2027.
Hoy, la aerolínea tiene una flota de 140 aeronaves y 13.000 empleados, y es la tercera de Brasil, detrás de Latam Brasil y Gol. Esta última dijo haber perdido 400 millones de dólares en el primer trimestre del año. Para tratar de controlarlas han decidido el alto casi total de sus vuelos, el retraso de pagos de arrendamiento, recortes de gastos no esenciales, retraso en la recepción de nuevas aeronaves, renegociación de términos y reducción de gastos de personal.
LATAM Airlines informa que tiene recursos para continuar hasta el 31 de julio por lo que aspira a conseguir créditos de bancos de Brasil por unos 600 millones de dólares sin tener que comprometer parte de su capital, pero todavía sigue negociando. En el mientras tanto el CEO de la compañía, Roberto Alvo señalaba en un video: “Han pasado cerca de dos meses ya desde que se inició esta dramática situación y lamentablemente no vemos un final cercano. He hecho todos los esfuerzos posibles por preservar nuestra caja y mantener al grupo lo más intacto posible (…) lamentablemente hemos llegado a la conclusión de que no tenemos ninguna otra opción que empezar a achicar el grupo y eso significa que tendremos que dejar ir a algunas de las personas que trabajan con nosotros”. La empresa echó 1.400 personas en Chile, Colombia, Ecuador y Perú.
Durante el fin de semana, la aerolínea Air Canada anunció el despido de aproximadamente 20,000 de sus 38,000 empleados como resultado de la actual crisis. La aerolínea tiene 225 aeronaves en tierra y ha reducido su capacidad en un 95%. Este despido se hará efectivo a partir del 7 de junio, añadió la aerolínea.
“Vamos a reducir significativamente nuestras operaciones para ajustarnos a las previsiones, lo que lamentablemente implica reducir entre un 50 y un 60% de nuestra plantilla” señaló la aerolínea en un comunicado.
De acuerdo con The Canadian Press, Air Canada planea despedir entre 19 mil y 22 mil 800 trabajadores.