Cariló, al igual que otras ciudades costeras, está en la primera línea de impacto como consecuencia del cambio climático, que, entre otras cosas, ha llevado al aumento del nivel del mar. Esta realidad no solo afecta la calidad del aire que respiramos y del agua que tomamos, sino que también cambia nuestra manera de vivir. En una localidad pequeña que cada año recibe miles de visitantes, estos cambios se hacen más que evidentes a simple vista. En respuesta a estos desafíos, surge la necesidad de un proyecto que unifique esfuerzos y promueva la sustentabilidad.

En el marco del Día Mundial del Medio Ambiente, se realizó una limpieza generalizada en Cariló. Al cierre de la jornada, frente a la Oficina de Turismo de la localidad, la Delegada Municipal, Candelaria Guerrero y el Intendente del Municipio de Pinamar, Juan Ibarguren, comunicaron que se está trabajando en un proyecto cuyas acciones permitan girar hacia un Cariló sustentable con una agenda concreta 2024/2030. Este ambicioso proyecto tiene como objetivo transformar a la localidad en un modelo de sostenibilidad con miras al futuro.

Frente a esta realidad, la Delegada Guerrero informó durante un encuentro, al cual se invitó a la comunidad, que se está trabajando en el proyecto de un Cariló sustentable, sobre la base de una agenda 2030, que avanzará con la sinergia necesaria entre la municipalidad, el sector privado y la comunidad. Este proyecto atraerá patrocinadores y establecerá un crecimiento ordenado y respetuoso con el medio ambiente.

Acompañada por Sebastián Cufari, de la Secretaría de Obras Públicas, y Ramiro Montes, de la Subsecretaría de Servicios Urbanos, la funcionaria explicó que el proyecto tiene como objetivo transformar la localidad en un modelo de economía circular, reduciendo el impacto ambiental de nuestras actividades y fomentando prácticas de consumo y producción sustentables. La participación del secretario de Obras Públicas es clave, ya que uno de los principales proyectos que se impulsará es la construcción de una pasarela sobre el Boulevard de la calle Divisadero, que será realizada con plástico reciclado de la zona a través de la cooperativa Reciclando Conciencia. También se trabajará fuerte en la concientización sobre el cuidado del agua y en ese sentido se favorecerá el diseño de jardines sustentables con plantas que no requieran riego. "El cuidado del agua es fundamental en nuestra localidad ya que la tomamos de las napas y son un recurso limitado que muchas veces, por desconocimiento, se derrocha. Además, un diseño sustentable de los jardines permitiría bajar la cantidad de basura en los puntos verdes", dijo Guerrero.

El proyecto anunciado, que queda así planteado en líneas generales, contará con la participación de diversas áreas municipales y buscará fomentar una colaboración público-privada efectiva. Para ampliar las propuestas y enriquecerla se invitará a empresas locales, ONGs y a toda la comunidad a participar en estas iniciativas.

Entre los resultados esperados se incluyen la reducción del impacto ambiental, la mejora de la calidad de vida de nuestros residentes y visitantes, y una mayor conciencia comunitaria. "Buscamos medir el impacto de nuestras acciones mediante indicadores de sostenibilidad y queremos realizar evaluaciones periódicas para mejorar nuestras estrategias", finalizó.

En conclusión, este proyecto tiene como objetivo transformar nuestra ciudad en un modelo de sostenibilidad y bienestar, promoviendo un entorno más limpio, saludable y ecológico para las generaciones futuras.

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